VENUS VIVE

Rodolfo II y Praga
Unas pinceladas de historia europea (s. XVI)

En Praga, Praha(1), como en otras ciudades europeas, todo su casco histórico es un museo en el verdadero sentido de este término.

El visitante se ve sorprendido, maravillado y también abrumado y fastidiado ante tanta imagen y construcción religiosa. Grupos escultóricos imponentes en fachadas, plazas y en el conocido Puente de Carlos. No podemos dejar de señalar esto pero realmente lo que nos interesa es la ciudad hermética que oculta brilla en todo su esplendor. Malá Strana; el inmenso palacio y su entorno, catedral de San Vito y jardines incluidos; la plaza del reloj y sus hermosas casas; la judería con sus sinagogas y su cementerio; la plaza de Wenceslao, en la que podemos ver el Museo Nacional con sus sorprendentes e impresionantes colecciones o esta fachada, entre muchas otras igualmente admirables.

Fachada

Y podríamos seguir enumerando lugares y obras de arte y la esencia de esta ciudad se nos escaparía por completo. No es descriptible, Praga es uno de esos lugares mágicos donde el viajero siente estar en casa, en ese mundo hermético unido por senderos invisibles y misteriosos. Nos dice K. Kerényi en su Hermes, conductor de las almas(2)que es el dios de aquellos que en ese mundo se mueven con confianza.

Dos personajes emergen en este mágico lugar, que seguramente están en el origen de su ambiente misterioso, acogedor y diáfano: Rodolfo II (Viena 1552 – Praga 1612) y el Rabino Löw (conocido como el Maharal de Praga) (Worms 1512 - Praga 1609). El primero sucedió como emperador del Sacro Imperio(3) a su padre Maximiliano II(4), trasladando la capital imperial de Viena a Praga a la que convirtió en centro de estudios alquímicos, astrológicos y mágico-científicos, como nos dice Francis Yates en su El Iluminismo Rosacruz.

Praga y Rodolfo II (que ha sido llamado el Hermes alemán) acogieron a todos aquellos interesados en los estudios esotéricos y también científicos, como Giordano Bruno, Tycho Brahe, Juan Kepler (nombrado astrólogo y matemático imperial a la muerte de Brahe), John Dee(5), Michel Mayer, Martín Ruland o el escultor Adriano de Vries. Los nombres que acabamos de citar nos dan una idea del movimiento cultural que en el siglo XVI animaba esta urbe a ambas orillas del río Moldava.

Mantel del restaurante Vikarka de Praga con ilustraciones de Atalanta Fugiens de Michael Maier.
Estos grabados de Atalanta Fugiens de Maier nos recibieron
en la mesa de un restaurante sito en el recinto del castillo.

El clima de tolerancia que inspiró y promovió el emperador y rey de Bohemia y Hungría se extendió a los judíos que gozaron de una libertad que habían perdido en otros países europeos. Uno de sus consejeros, además su médico personal y confesor, fue el cabalista Pistorius (Nidda, 1546 - Praga, 1608). También se entrevistó con el rabino Löw, jefe de la comunidad judía praguense, amigo de Kepler y Brahe y a quien se atribuye la creación del Golem de Praga(6).

Hay que resaltar esta tolerancia religiosa de Rodolfo II que favoreció la convivencia del catolicismo con los movimientos luteranos o el originado por Jan Hus, surgido precisamente en Bohemia, donde años después, tras la muerte de Rodolfo II, en medio de una complicada sucesión al trono se iniciaría la Guerra de los Treinta Años.

Su hermano Matías, ya anciano, es proclamado emperador y rey de Bohemia y a su muerte en 1617 es elegido Fernando de Estiria, quien arremetió contra la libertad religiosa y el clima de convivencia que había favorecido la difusión del movimiento hermético centroeuropeo. La liga de príncipes protestantes con el Elector del Palatinado Federico V al frente, fue derrotada por los ejércitos católicos y el matrimonio Federico e Isabel se refugió en los Países Bajos donde vivirían con sus hijos en el exilio.(7)

Rodolfo II era sobrino de Felipe II (su madre María era la primogénita de Carlos V e Isabel de Portugal) y fue educado en España en la corte de su tío, permaneciendo allí de los once a los diecinueve años. Este hecho nos ha dado que pensar, y queremos señalarlo pues nos parece muy significativo de cara a revindicar la figura de Felipe II(8) constructor de esa obra de arte que es El Escorial, del que se ocupó a cabalidad hasta en los mínimos detalles. Empezando por la elección del lugar para lo que formó una comisión (geólogos, astrólogos, etc.) que se encargó de buscar el sitio adecuado. Y bástenos nombrar algunas de las figuras que participaron en esta magna obra, como Juan de Herrera, Juan Bautista de Toledo o Arias Montano a quien el rey encargó la biblioteca, una de las joyas del Escorial(9). Felipe II aportó a la Biblioteca la suya personal; entre esos volúmenes, por poner algún ejemplo, estaba De Triplice Vita, de Ficino o La Monada Jeroglífica de John Dee; con este último, nos dice René Taylor(10), se relacionó en Londres por ser el astrólogo de su segunda esposa: María Tudor.(11)

Rodolfo II fue contemporáneo de Isabel I de Inglaterra (1533 – 1603)(12), como ella permaneció soltero(13) toda su vida. Ambos fueron mecenas de artistas y los dos reinados propiciaron la difusión de la Tradición Hermética e hicieron posible un florecimiento de las artes y las ciencias a las que ellos amaban y de las que participaban directamente.

Finalizamos con las palabras que dirige Rodolfo II a sus ayudantes de cámara, asombrados de la paz que desciende sobre él en sus postreros días:

Mis queridos amigos: cuando mi padre me llamó para que regresara de España a mi patria, me invadió tal alegría que a la noche siguiente no pude dormir. ¿por qué voy a estar ahora triste, por qué no voy a sentirme aún más alegre cuando comienza mi viaje hacia la patria celeste en la que no hay separación, no hay cambio, no hay maleficio?(14)

Mercurio y Psique, de Adriaen de Vries.
Mercurio y Psique
Escultura realizada por Vries para el emperador
durante su estancia en Praga. Actualmente en el Museo del Louvre.

M. V. Espín         

NOTAS

(1) Prah, significa Umbral.

(2) Editorial Sexto Piso, 2010.

(3) Francisco Ariza dedica parte de su libro El Simbolismo de la Historia, una perspectiva hermética de la Tradición de Occidente a tratar el tema del Sacro Imperio.

(4) Maximiliano II sucedió a su padre Fernando I y este a su hermano Carlos V, hijos de Felipe el Hermoso y Juana I de Castilla; descendientes a su vez: él, del emperador Maximiliano I y María de Borgoña y ella de los Reyes Católicos.

(5) Se señala repetidamente que la influencia de John Dee y su viaje a la Praga rudolfina, en el periodo de (1583-1589), está detrás del movimiento rosacruz y de sus Manifiestos, entre otras razones por las citas en ellos de su Mónada Jeroglífica.

(6) Federico González Frías trata el tema del Golem en su Diccionario de Símbolos y Temas Misteriosos.

(7) Ver: Frances Yates: El Iluminismo Rosacruz.

(8) Felipe II (1527-1598) fue un hombre de su tiempo, un príncipe renacentista, viajó y vivió en varios países de Europa antes de acceder al trono español por abdicación de su padre, el emperador Carlos V, quien por cierto fue educado por su tía Margarita de Austria, regente de los Países Bajos. Esta Margarita fue una de las protectoras de Agrippa y aquella a quien dedica su Nobleza y Preexcelencia del sexo Femenino.

(9) Arias Montano fue un hombre del Renacimiento y su autoridad reconocida, en su tiempo, en toda Europa.

(10) René Taylor, Arquitectura y  Magia, consideraciones sobre la idea de El Escorial.

(11) En el British Museum se conservan algunos objetos personales de Dee, entre ellos un espejo de obsidiana de origen mexicano que Felipe II le regaló.

(12) Ver sobre este tema: “El Renacimiento Isabelino” de Antoni Guri.

(13) Aunque Rodolfo tuvo varios hijos, algunos de una relación bastante estable, aunque en la sombra, con Catalina Strada.

(14) Fhilippe Erlanger, Rodolfo II de Habsburgo 1552 - 1612, el emperador insólito. Ed. Espasa - Calpe, col. Austral. Madrid 1974.

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